El camino de preparación para la vida eterna

(RV).- Francisco I la mañana del sábado, durante la Misa en la Casa de Santa Marta, comentó el Evangelio que narra la conversión de San Mateo, un recaudador de impuestos y pecador que Jesús lo hace discípulo suyo, y aunque el dinero es su ídolo en la vida se levanta y abandona la mesa de recaudación, siendo que lo sigue como si dijese su nombre.

Esta elección le cambia, de igual manera que cambió a Pedro, después de haberlo negado tres veces y llorar amargamente por ello, o cuando Cristo en la cruz convierte al buen ladrón. Jesús, también, va a la casa de Mateo y mientras se sienta a la mesa llegan muchos pecadores, como ocurre en la parábola del rey que ordena a los criados ir a buscar en los cruces de caminos a gente de toda condición para invitarlos al banquete nupcial de su hijo. Y de ete modo, los publicanos sentían que el hijo de Dios les devolvía la dignidad.

Todos nosotros, igualmente en la vida – concluyó el Papa – hemos sido ayudados en alguna ocasión por la persona de un sacerdote que nos ha enseñado la doctrina o perdonado los pecados, como si se tratase de seguir adelante, caminar con la certidumbre de ser cristianos, y prepararnos para la eternidad.

(RC – RV)

el-papa-en-el-balcon-del-palacio-apostolico.png el-papa-con-el-patriarca-de-antioquia.png el-santo-padre-en-turquia.png big-bang.jpg catedral-de-san-rufino-asis.jpg ivo-josipovic.png luz-de-esperanza.jpg


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *