La actualidad de la doctrina social de la iglesia

Ciudad del Vaticano, 22 de noviembre 20113 (VIS).- El Santo Padre envió ayer un mensaje a los participantes del Tercer Encuentro de la Doctrina Social de la Iglesia (DSI), que se celebra en Verona (Italia) del 21 al 24 de noviembre.

El sumo pontífice ha dirigido unas palabras a los jóvenes, para darles “fuerza para continuar hacia delante” y a los ancianos que ha calificado como “la memoria del pueblo”. Hoy en día, ambos colectivos de personas son excluídos, porque no responden a las lógicas productivas y a una visión utilitaria de la sociedad, no cumplen ninguno de los criterios útiles de inversión. Se dice que son “pasivos”, que no producen, y en la economía de mercado no son sujetos de producción. No debemos olvidar, sin embargo, que son el futuro de la sociedad, la promesa de un mundo mejor y los depositarios del saber, respectivamente. La Doctrina Social de la Iglesia, su magisterio es un punto de referencia, que representa la virtud y orientación resultado de la reflexión y actividad. Es útil para no perderse en las ideologías como los que trabajan en la economía y las finanzas, que están sin duda atraídos por el lucro y su labor se enfoca solamente hacia el beneficio, convirtiéndose en esclavos del dinero. La DSI contiene un patrimonio que es capaz incluso hoy de guiar a las personas y mantenerlas libres. Se necesita valor, pensamiento y fe para estar dentro del mercado guiados por una conciencia que se centra en la dignidad de la persona por contra de la idolatría del dinero.

Francisco I concluyó el mensaje hablando de la cooperación cristiana, este es el camino donde el trabajo y la dignidad de la persona se encuentran, y la solidaridad se aplica para garantizar y asegurar su pluralidad. No considerar actual esta forma de hacer constituye un empobrecimiento que no promueve la identidad.

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