Conmemoración en Hiroshima y Nagasaki

(RV).- La guerra sólo trae destrucción y muerte. asi se dirigía Juan Pablo II al pueblo japonés hace 33 años, recordando las víctimas provocadas por la explosión atómica acaecida en 1945 en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, durante su visita en 1981, porque recordar el pasado es preocuparse por el futuro de la humanidad, que no está destinada a su destrucción a pesar de las divergencias ideológicas, ya que estas pueden y deben ser resueltas a través de medios que no sean violentos. Y con este empeño, a 69 años de aquel terrible suceso, Francisco I reafirma la necesidad de conseguir la paz, con valor y respeto, ante las provocaciones,  enfrentamientos y hostilidades.

(GM – RV)

CET-agradece-viaje-pontificio-a-ankara-y-estambul.png el-papa-con-la-curia-romana.png el-obispo-de-roma-en-papamovil.png coloquio-en-el-aula-nueva-del-sinodo.png juan-pablo-ii.jpg paz.jpg riccardo-di-segni-rabino-de-roma.png


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *