12 noviembre 2012, 5:35

La psicología basada en pensadores ateos no se corresponde con la nueva evangelización.

La unicidad del pensamiento cristiano que defiende nuestro marco teórico, excluye por defecto a pensadores seminales como Sigmund Freud y Alfred Adler, que son declaradamente ateos. Igual que no tendría sentido pretender que la psicología freudiana y adleriana, sean cristianas, tampoco lo tiene que se diga que Santo Tomás de Aquino y Santa Teresa Benedicta de la Cruz pertenecen a la Psicología Adleriana.

La historia del Emperador Juliano el Apóstata, es un buen ejemplo pedagógico para que entiendan esta reflexión profunda, vivió y creció en su infancia en un monasterio benedictino, y su enseñanza cristiana fue truncada a temprana edad en su adolescencia, puesto que siendo heredero del trono del Imperio (durante años fue ignorante de esta circunstancia) su destino terminó en el paganismo y las filosofías del sincretismo. La voluntad de poder, el conocimiento de las enseñanzas greco-romanas con la exclusión del pensamiento judeo-cristiano, su vida de orgullo y vanidad humanas acabaron con su fe.

La lección de este texto es que no podemos excluir la tradición judeo-cristiana del pensamiento greco-romano. Las corrientes de pensamiento platónico-agustiniano y aristotélico-tomista, son la base del conocimiento de la Iglesia. Si citamos al teólogo católico austríaco Josef Weismayer, la psicología es una disciplina teológica. Si atendemos a su definición en origen, la psicología es el estudio de la persona y el alma humana. Por esta razón, es más correcto centrarse en el personalismo cristiano de Emmanuel Mounier, que encierra la verdad sobre la ética y moral de la persona humana como motor de transformación del mundo.

A nuestro modo de entender la cuestión planteada es más la visión sobre el bien y el mal, la que guía la ¨persona y acto¨ (1969) trabajo de Karol Wojtyla en que analiza la decisión humana como la principal fuente de la responsabilidad moral del hombre. La moral del ser humano es la responsable última del comportamiento de si mismo, es la que guía la conducta humana, y en palabras de Juan Pablo II, la moral objetiva es la única verdad revelada al hombre por la gracia de Dios.

Quienes pretenden convencer con su ateismo al ser humano, como así hicieron Sigmund Freud y Alfred Adler, acabarán como el Emperador Juliano, el Apóstata.

Si tenemos en cuenta la base en que se sustenta el análisis libre de Alfred Adler, heterodoxo del psicoanalisis de Sigmund Freud , que creó la segunda escuela vienesa, y por el que advertimos que los complejos de superioridad e inferioridad definen las tendencias de comportamiento de la persona de su estado normal al patológico, llegando a la conclusión de que se trata de un enfoque teórico afin a la filosofía de Friedrich Nietzsche y que explica las tendencias del comportamiento humano como resultado de la voluntad de poder.

En la concepción cristiana entendemos que aquello que se encuentra más allá de lo fenomenológico es pura especulación, y también que la primera y segunda escuela vienesa, así como sus antecedentes en la corriente de pensamiento nihilista son completamente incompatibles con nuestra profesión de fe, a causa de su ateísmo.

Precisamente les emplazamos a que progresen en su trabajo profesional, y que su empeño por el psicoanálisis freudiano, y el análisis libre adleriano, que son un delirio de ateos (ej. complejos de Edipo y Electra, de superioridad e inferioridad, …) basado en la genealogía de la moral de Friedrich Nietzsche, más allá de la fenomenología de Edith Stein; aunque existen grandes hechos y esfuerzos para relacionarlos con el tomismo como Rudolf Allers, les pedimos que no sean su base teórica fundamental, puesto que la tercera escuela vienesa de Victor Frankl, el análisis existencial y logoterapia, es más apropiado a la ética cristiana.

La primera y segunda escuela vienesa de Freud y Adler pertenecen a un periodo de la historia del siglo XX marcado por el ateismo, entre ellas numerosas corrientes del pensamiento de la época: el humanismo marxista de Marcuse, Fromn … el existencialismo ateo de Sartre, Camus, … son considerados contrarios al Magisterio de la Iglesia.

Las encíclicas sociales apuntan en este sentido, y es necesario aclarar que la psicología basada en pensadores ateos no se corresponde con el objetivo principal de la nueva evangelización.

Continuación …

psi.png cec-ere.png cryosat.png justicia.png crin.png rosa-negra.png psicologia.png


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *