Que Dios nos asista y proteja

(RV).- El que no se arrepiente no es perdonado, lo afirmó Francisco I en la Misa de esta mañana celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta. El Estado que roba a los ciudadanos, comete el mismo pecado que aquel quien evade los impuestos. El Papa reafirmó que todos debemos estar atentos a no convertirnos en corruptos.

Sin justicia no es posible el perdón de los pecados, solamente con el arrepentimiento hay redención. El Obispo de Roma se detuvo en su homilía sobre la exhortación del Señor por el arrepentido, del que habla el Evangelio. Pero Jesús, también añade que quien peca pero no se arrepiente no puede ser salvado.

Y esto, subrayó el sumo pontífice, es así porque el corrupto está fijo en un estado de suficiencia, que no sabe qué es la humildad y Cristo los llama hipócritas, sepulcros blanqueados por fuera, pero llenos de huesos muertos. Un pecador que se vanagloria no vive el mensaje evangélico sino el espíritu inmundo.

El Santo Padre recordó que San Pablo lo dice claramente en su Carta a los cristianos de Roma: “No se uniformen a este mundo”. Pidamos a Dios que nos asista y proteja.

(María Fernanda Bernasconi – RV)

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